Valora mística en evangelio

Original: http://www.elnorte.com/ciencia/articulo/630618/

El Evangelio de Judas, el códice Nag-hammadi y los escritos del Mar Muerto son los textos cristianos considerados más importantes

Ciudad de México  (21 abril 2006).-  La recuperación del Evangelio de Judas es "el hallazgo más importante de los últimos 60 años" en el ámbito de los estudios cristianos, afirmó ayer Marvin Meyer, especialista en textos bíblicos y cristianismo de la Universidad de Chapman en Orange, California.

Meyer formó parte del equipo que durante cinco años restauró y tradujo del copto al inglés el evangelio encontrado en 1970 por un campesino en una gruta de El Minya, Egipto.

Desde su publicación por National Geographic, el 6 de abril pasado, el documento ha provocado polémica por presentar a Judas Iscariote no como el traidor, sino como el discípulo predilecto de Jesús, a quien éste habría encargado entregarlo a los romanos para lograr su sacrificio.

Para Meyer, se trata de un "retrato místico" de Judas y de su maestro, realizado a través de la mirada del gnosticismo, movimiento místico que tuvo lugar durante los primeros años del cristianismo y consideraba al cuerpo una cárcel del alma.

La importancia del documento, explicó el también director del proyecto de textos coptos del Instituto de Documentos Antiguos y Cristianismo de la Universidad de Claremont, radica en que es una de las primeras fuentes que pueden aportar información sobre la escuela gnóstica setiana.

"Ilustra que las 'buenas noticias' de Jesús podían ser entendidas de diversas maneras por las diferentes comunidades cristianas", señaló Meyer durante la rueda de prensa en la que se anunció la edición, el 25 de abril, del número de la revista National Geographic en español dedicado el Evangelio de Judas.

El fin de la publicación, advirtió su director editorial, Omar López, es difundir un conocimiento científico y teológico, que no pretende provocar a la iglesia católica —que ha descalificado este material.

Meyer estimó que el texto original del evangelio, en griego, fue escrito alrededor del año 150, pues en el 180, San Ireneo, Obispo de Lyon, ya había hecho mención a lo que podría ser el Evangelio de Judas en su tratado Contra la herejía, sin embargo, no hay certeza de que éste sea el mismo escrito.

"Al menos no es idéntico, ésta es una traducción al copto del siglo 4, y es posible que haya sufrido algunas modificaciones".

El evangelio despierta también preguntas sobre el destino final de Judas: si estaba libre de remordimientos, ¿por qué se suicidó? Para Meyer la respuesta es tan oscura como cualquier otro intento de extraer verdades históricas de los textos religiosos.

"En realidad", recordó, "los evangelios canónicos aportan versiones diferentes de la muerte de Judas; uno dice que se ahorcó pero otro refiere que cayó y las vísceras se le salieron del cuerpo".

En todo caso el texto no hace más que reflejar un punto de vista teológico, como todo evangelio, advirtió.

Con el 20 por ciento del material perdido por una descuidada protección del papiro, la publicación del evangelio salió en Estados Unidos sin estar totalmente reconstruido.

"Todavía pueden hacérsele ajustes", reconoció Meyer y reveló que ya durante su impresión en inglés hubo que parar la prensa para incluir un fragmento recién encontrado en Ohio.

La Fundación Mecenas, que adquirió el documento en el 2000, no ha dado a conocer el monto de la compra, que López calculó en 300 mil dólares.